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La Semana Santa en Valencia ha culminado con un 90% de ocupación turística, superando así las previsiones realizadas entre el 74 y 85%. Y eso no es todo, pues durante dicho periodo se han alcanzado récords de entradas a espacios culturales en la capital del Turia, como la Ciudad de las Artes y de las Ciencias, El Museo de Bellas Artes o el IVAM, entre otros.
La lluvia, que ha protagonizado estas fiestas, no ha afectado en nada a la cantidad de turistas, alcanzando récords históricos de venta de entradas a la citada Ciudad de las Artes y de las Ciencias. Y es que, mucho ha tenido que ver la exposición de Harry Potter «Harry Potter The Exhibition» que se encuentra vigente en esta zona, ya que ha incrementado en un 27% la venta de entradas con respecto al mismo periodo vacacional en 2018.
El Museo de Bellas Artes también vio incrementada su afluencia, en este caso en un 132%, influido por la exposición «El inicio de la pintura moderna en España: Sorolla y su tiempo», gracias a la cual, desde el Jueves Santo hasta el Domingo de Pascua, las visitas aumentaron más de la mitad respecto a 2018, pasando de 2.463 visitantes a 5.718 en 2019.
El Instituto Valenciano de Arte Moderno (IVAM) vio duplicadas sus visitas, y las Bombas Gens recibió casi un 22% más de turistas.
Tras analizar los buenos datos obtenidos, la concejala de Turismo de Valencia, Sandra Gómez, ha corroborado la mejora significativa de los datos de ocupación durante la Semana Santa 2019, respecto a las previsiones que se habían realizado y a pesar del mal tiempo que ha hecho durante las fiestas.
A la espera de la publicación de los datos oficiales por el INE, se puede afirmar la alta rentabilidad turística de Valencia, más allá de destino de sol y playa.
En los últimos años, Valencia ofrece múltiples alternativas culturales y de ocio de calidad. Además, se está trabajando en la línea de situar a la ciudad como destino cultural nacional e internacional. Pues, según Gómez, este tipo de destino reduce las cancelaciones en alojamientos cuando las previsiones meteorológicas son adversas y evitan así que la actividad turística se resienta.
De este modo, tal y como ha afirmado Gómez, el reto que se han propuesto para los próximos meses pasa por desestacionalizar la ciudad de Valencia como destino turístico de sol y playa para llegar así a registrar elevadas ocupaciones fuera de los periodos vacacionales.